martes, 28 de septiembre de 2010

-¿De dónde viene señor?
-De mi pasado... Pero de uno lejano.
-¿Cuál es su nombre?
-Depende de la persona que sea con ud.
-¿Cuántos años tiene?
-Aproximadamente una decada más de lo que indica mi documento.
-¿A qué se dedica?
-A sobrevivir.
-¿Está ud casado?
-Sí, con mi destino.
-¿Qué espera de este lugar?
-Yo no espero, es un lujo al que no estoy acostumbrado.
-Por favor señor, responda en forma correcta lo que se le pregunta.
-Dígame entonces que es lo correcto, dígame entonces qué es lo que quiere escuchar. Así, sabré que mentir no siempre esta "mal".

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Que yo no soy que es él
Que yo actué bien y él no
Ah no!, de acá yo no me muevo.
Que por cuestión de piel, de sexo, religión
tus zapatos no me los pruebo.


¿A quién le vamos a tirar una pared
cuando ya no nos quede nadie?
Tal vez un perro fiel a cambio de comer
soporte hasta lo insoportable.
Temiendo ser peor, temiendo ser mejor,
temiendo al fin, siempre temiendo.
Viviendo en el ayer, aletargando el hoy.
Sí, Víctor, sí, sobreviviendo.
Juzgando al por mayor,
te alejás más y más
del jucio que más importa.
Que es el juicio interior.
Que es el que hay que afrontar
siendo parte de esta torta.

La atribuís el groove de un riff,
ciento por ciento
a la paz de la nicotina.
Hipocondría maternal y paternal.
Hereditaria vitamina.

Los placeres te acortan la correa.
Y vos que te pensás un indomable.
¿Qué gracia tiene andar por esta sociedad
jactandose de responsable?

Si como un pulpo vas,
tirando piedras,
no hay dónde esconder tantas manos.
Es mejor asumir
la cobardía de huir,
a la responsabilidad de vivir.

No importa cuánto me puedas alejar de la realidad.
Yo siempre vuelvo.
Psicología infernal; picante, dulce y sal.
Pero despierto y ya no vuelvo.

Pasado el tiempo al fin,
el espejo devuelve
una imagen más familiar.
Voy eligiendo a gusto
y alternando puede haber picante, dulce y sal.

Me bato a duelo con quiém diga que voy bien,
porque hay rachas en esta vida.
Soy grande y qué señor no vaya a confundir
la soberbia con la autoestima!

Que la soberbia mira desde más arriba
y no llora penas ajenas.
En cambio el autoestima se transmite
y contagia a cualquier persona buena.

Juzgando al por mayor,
te alejas más y más
del juicio que más importa.
Que es el jucio interior,
que es el que hay que afrontar
siendo parte de esta torta.

Si como un pulpo vas.
Tirando piedras
no hay dónde esconder tantas manos...
Es mejor asumir
la cobardía de huir,
a la responsabilidad de vivir.   !
Si para recobrar lo recobrado

debí perder primero lo perdido,
si para conseguir lo conseguido
tuve que soportar lo soportado,

Si para estar ahora enamorado
fue menester haber estado herido,
tengo por bien sufrido lo sufrido,
tengo por bien llorado lo llorado.

Porque después de todo he comprobado
que no se goza bien de lo gozado
sino después de haberlo padecido.

Porque después de todo he comprendido
por lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Y la vida se acuesta a mi lado
Y con ella me empiezo a reir
Yahora sueño que voy caminando por todas las cosas que faltan vivir, y sentir.


viernes, 17 de septiembre de 2010

Sólo es capaz
de realizar los sueños
el que, cuando llega la hora,
sabe estar despierto.

domingo, 12 de septiembre de 2010

La verdad es mentira hasta que se demuestre lo contrario.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Para El Principito; con amor, iae.~

Bajo el disfráz de sentimiento


Pienso ir a visitar al Principito. En realidad no lo pienso, porque si lo pensara… si realmente pensara en la posibilidad de viajar a un planeta desconocido en busca de una criaturita semejante me tildarían de loca, me encerrarían en un manicomio y jamás lograria mi objetivo. Entonces siento, “siento ganas de ir a visitar al Principito… lo siento en el alma”.
De esta forma ningun ‘razonsologo’ podría venir a racionalizar mi sentimiento, por ende, sería una locura sentida y totalmente aceptada, tan aceptada y paradójicamente coherente, corriente, que dejaría de ser locura.
Perdida en sueños se que te voy a encontrar, Principito. Me voy a encontrar. Allá, dónde la cotidianeidad este rodeada de quehaceres importantes y no solo de urgencias que relevancia nunca tuvieron. Dónde los ideales puros y sinceros no sean utópicos. Lejos, muy lejos dónde el tic-tac del reloj vaya al ritmo del latir de mi corazón.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Quiero escucharte decir
lo que gritan tus ojos.~